Pronóstico estacional de lluvias en el Comahue y Cuenca de Río Negro
Pronóstico estacional ASO 2020 – actualizado el 19.08.2020
El análisis de los indicadores utilizados para estimar cualitativamente la precipitación para el trimestre ASO 2020 sugiere una situación de precipitación normal a superior a lo normal para las cuencas de los ríos Neuquén, Limay y Negro. Hay que recordar que hacia el final de este trimestre, las cuencas de los ríos Neuquén y Limay están finalizando la estación lluviosa. En el caso de la cuenca del río Negro, el ciclo medio anual de precipitación sobre esta cuenca muestra un leve ascenso de los valores en esta época.
Resumen de los indicadores:
Cuenca Neuquén | Cuenca Limay | Cuenca Negro | |
ENOS | |||
TSM Pacífico Sur este | |||
TSM Pacífico Sur central | |||
TSM Atlántico | |||
TSM Índico | |||
Circulación Pacífico | |||
Circulación Atlántico | |||
Circulación Patagonia | |||
Viento Zonal | |||
Viento meridional | |||
Humedad Disponible |
El sombreado naranja (verde) señala que el indicador favorece la precipitación sub-normal (sobre-normal) y el gris señalan que el indicador favorece una situación normal.
Los indicadores utilizados son los siguientes:
Temperatura de la Superficie del Mar:
Cuencas de los ríos Neuquén y Limay: en general, las anomalías de TSM en el océano Pacífico sur no favorecen la lluvia mientras que las anomalías de TSM en los océanos Pacífico central, Atlántico e Índico tienen un efecto neutro sobre la precipitación en estas cuencas.
Cuenca del río Negro: anomalías de TSM en el océano Pacífico central y en cercanías de la costa sudamericana favorecen la precipitación. En particular, lo mismo ocurre sobre el océano Atlántico con las anomalías de TSM en la costa argentina. Las anomalías sobre el océano Índico tienen un efecto neutro sobre la precipitación en esta cuenca.
Circulación hemisférica:
Cuencas de los ríos Neuquén y Limay: un debilitamiento del anticiclón del Atlántico y la presencia de anomalías positivas de geopotencial en el sur del país son indicadores favorables para la lluvia.
Cuenca del río Negro: tanto la circulación en la Patagonia como un debilitamiento del anticiclón del océano Atlántico favorecen la precipitación en la cuenca mientras que anomalías negativas de geopotencial en el centro del país actúan en sentido opuesto.
Circulación regional:
Cuencas de los ríos Neuquén y Limay: el patrón de viento zonal en capas bajas con anomalías negativas en la Patagonia y positivas sobre el océano Atlántico favorecen la precipitación en las cuencas. Lo mismo sucede con las anomalías positivas del viento meridional en capas bajas en la cuenca del río Neuquén, en tanto que para el Limay la señal no es clara.
Cuenca del río Negro: anomalías negativas de viento zonal en capas bajas en la Patagonia favorecen la precipitación. El patrón de viento meridional en capas bajas no presenta señal sobre la cuenca.
Humedad:
Cuencas de los ríos Neuquén, Limay y Negro: anomalías positivas de contenido de humedad en la atmósfera sobre las cuencas favorecen las precipitaciones sobre las mismas.